La cima del Montcabrer y las cavas de Mariola
Disfruta en plena Sierra de Mariola de un recorrido paisajístico y cultural, ascendiendo al Montcabrer (la tercera cima más alta de la provincia de Alicante) y visitando las pozas o cavas que entre los siglos XVII y XX contribuyeron al comercio de nieve en Agres
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Hacía tiempo que teníamos ganas de subir al Montcabrer. Estábamos reservando esta excursión para la primavera. Pero en vista de las temperaturas atípicas del mes de enero (las más altas en la Comunidad Valenciana desde que hay registro) decidimos adelantar la visita. ¡Decisión acertada! Este despejado día nos regaló unas vistas increíbles. Os contamos cómo fue.

Dos rutas en una en la Sierra de Mariola
El recorrido une dos rutas en una. Por una parte, el ascenso al pico del Teix y al Montcabrer siguiendo el PR-CV 27. Por otra, la visita a los pozos de nieve de Mariola, usados siglos atrás para el comercio de nieve de la zona. Así pues, a la bajada del Montcabrer visitamos las cavas y regresamos por el PR-CV 104 desde la cava de Don Miguel al punto de origen.
Ascenso hasta el refugio Montcabrer
Decidimos partir del área recreativa de Molí Mato (o Mont-Blanc) con su Refugio Zamorano. También está habilitada como zona de acampada. Otra posibilidad para completar esta ruta circular es empezar en el área recreativa del Convento de la Mare de Deu d’Agres. Salimos ascendiendo por la carretera. En pocos metros nos desviamos por la pista a la izquierda en ligero ascenso hasta el santuario. Este cuenta con zona de aparcamiento, mesas, fuente y restaurante. Si nos fijamos en las paredes, aparecen todas con agujeros. Este paraje se conoce como "Coves dels Bous".


Una vez aquí, continuamos ascendiendo por la izquierda. Tenemos buenas vistas del Barranc del Molí y Agres. Siguiendo el Sender botànic dels Teixos nos adentramos en el Barranc de l'Assut. En continua subida llegamos a una zona de repoblación de pino blanco. Durante gran parte del camino, coincidirán las marcas blancas y amarillas del PR-CV 27 (que une Agres con Cocentaina) con las indicaciones de la ruta verde. Se conoce con el nombre de "a la sombra de las cavas". Es el itinerario por L'Ombria de Mariola.

Llega un momento que el sendero botánico que habíamos iniciado en el santuario se desvía. Estamos cruzando la pista que lleva al barranco de la Teixera d'Agres. Pero nosotros seguimos en pronunciado ascenso disfrutando ya de buenas vistas.
Pronto estamos en las inmediaciones de la pequeña Cava del Teix, del siglo XVIII. Prestamos atención para no pasarla de largo ya que se encuentra bien escondida en la maleza. Justo un poco antes de alcanzar las escaleras que suben al refugio del Montcabrer, un desvío a la izquierda conduce a la cava. La alcanzamos con alguna dificultad enganchándonos en la espesa maleza. Este camino no está muy transitado. Volvemos atrás y en un pis-pas estamos en el refugio.



Preciosas vistas desde las cimas
Nos dirigimos ahora al pico del Teix (a 1264 metros), también conocido como "Comptador", donde está la caseta del guarda forestal. No sin antes pararnos a explorar la Cava de l'Habitació, perfectamente conservada. Una vez arriba, el guarda muy amable nos explica el paisaje. Vemos el Benicadell, el embalse de Beniarrés y sobre él, la Safor. Cocentaina y, encima, la Serrella. Prestando atención, en la línea de costa somos capaces de divisar la isla de Mallorca, y la de Ibiza sobre el Montgó.
Al norte, escondido en la neblina, destaca la mole del Penyagolosa, justo por encima del embalse de Bellús. Dirigiendo nuestra mirada hacia el noreste, se intuye la Albufera y una línea blanca que es la población de Valencia. Girando la cabeza al sureste, en la lejanía se ve la Sierra de Aitana y, ahí bien cerca, tenemos el impresionante Montcabrer al que nos dirigimos a continuación.


Regresamos sobre nuestros pasos al cruce de caminos. Dejamos a nuestra derecha la señalización metálica que indica el camino a las cavas. Tomamos la pista a la derecha cruzando la cadena. Ahí, tenemos una buena panorámica del camino que nos espera. Descendemos hasta el cruce de caminos, donde la señalización nos confirma que estamos en el PR-CV 27. Desde ahí, en ligero ascenso, vamos acercándonos a la base del Montcabrer.
En 20 minutos, llegamos al enlace con el GR-7 (donde encontramos un buzón bien conservado). En hora y media (unos 3 kilómetros), a la cima. Para ello, vamos bordeando la montaña. Bajo nosotros, se encuentran los restos de una construcción bastante grande: el Mas de Llopis. Finalmente, atacamos la cima por la vertiente sur en un último esfuerzo. Enseguida, ante nuestro ojos el vértice geodésico y un buzón tallado en la piedra en el que dejar constancia de la hazaña.




El recorrido por las cavas de Mariola
Ya hemos visto algunos de los neveros, pero nos quedan los mejores por ver. Iniciamos la bajada. Pero, en lugar de volver por donde hemos venido, seguimos el camino hacia el oeste por terreno pedregoso. Desde ahí, se ve el camino que hemos recorrido. La caseta forestal y, a la izquierda, en pequeño la espectacular Cava Arquejada a la que nos dirigimos. Estamos atentos para tomar un desvío a la derecha por senda estrecha de tierra que desciende rápido hasta el barranco de Paraets.


Nos encontramos con la pista y comenzamos a ascender de nuevo al cruce de caminos del refugio. Ahí retomamos la ruta verde que visita las cavas. Ya en la pista, en menos de 5 minutos estamos en la Cava Gran (conocida como Cava Arquejada por motivos obvios), recientemente restaurada. Esta preciosidad con arcos de estilo gótico, se construyó entre los siglos XVII y XVIII. Estuvo en uso hasta principios del siglo XX. En su interior crece un tejo, típico de la zona.

Siguiendo por la pista forestal, nos topamos en pocos metros con el desvío que lleva a la Cava del Buitre, que también visitamos. Justo al regresar a la pista forestal, enseguida la debemos abandonar para tomar el sendero que sigue hacia el oeste por el lapiaz. Prestamos atención a los montones de piedras que han dejado otros senderistas ya que el camino está un poco desdibujado.
Más adelante, nos juntamos con la amplia pista del Camino del Portell. Seguimos unos metros antes de desviarnos hacia la Penya del Rellotge o Alt de la Cava. Primero, vamos por senda entre pinos y luego tomamos la cordal que nos acerca hasta una fortificación. No se trata de un castillo, aunque lo parece. Sino que es la Cava de Don Miguel que data de 1792.

La aventura de hoy está llegando a su fin. Es hora de descender hasta el área recreativa de Mont-Blanc donde dejamos el coche por la mañana. Para ello, seguimos sin pérdida el PR-CV 104 que nos conduce hasta la parte trasera del Refugio Molí Mato.

